Sin pinches calcetas
            regresé
            de la escuela.
            Me escondí
            en el rancho,
            esperando
            el abrazo de alguien lejano.
            Bien gachos
            los vatos
            de la chorrera
            me miran
            y se la pasan
            cotorreando.
            En friega
            recojo el llanto
            y digo
            no estén chingando.
            - Pinche esquincle -
            me decían
            aquellos cagados.
            Mi ama
            ¿dónde está?
            que la ando necesitando. 
            - Córrele
            prieto chamaco,
            que te guacareo -
            me dijo Don Paco burrero. 
            Ya no jalo
            decía yo,
            la raza
            solo me pasa
            fregando.
            
            Mi apa,
            por tanto desmadre
            en el rancho,
            me va a dar
            de putazos.
            Y mi carnal
            me ha de hocicar
            - pinche chamaco
            ¿otra vez al pedo
            vienes llegando? -
            A este paso
            mejor con la burra
            me quedaré,
            con pura plática
            sí me la he de ligar
            y ya unas ricas toras
            me quiero echar,
            o un chesco
            porque ni madres
            con esta pinche friega
            infernal.
            - Eh pinche perro -
            me gritó mi compa de allá,
            En chinga
            fui pa' donde él.
            - ¿qué traes?
            ¿porque andas todo así
            demacrado?
            ¿te fuiste de viejas?
            ¿o anduviste de peda? -
            Yo nomás le dije
            güey, me voy de pinche provincia
            ya me hinché
            y ahuevo
            quiero mis pinches calcetas.